La gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, declaró esta semana la emergencia sanitaria y agropecuaria en Río Negro a raíz del avance de la gripe aviar en la región. La medida alcanza a los establecimientos de producción avícola de la provincia por un año desde la publicación del decreto.

El pliego firmado por la mandataria rionegrina establece que se exime, total o parcialmente, en función de nivel de afectación, a los productores que realizan sus labores en las actividades avícolas del pago del impuesto inmobiliario de inmuebles rurales y sub rurales. Además de eso, se les quitará la obligación de pagar, por el término de un año, el Impuesto a los Automotores.

También, Carreras facultó a la Agencia de Recaudación Tributaria y al Ministerio de Producción y Agroindustria a evaluar la capacidad contributiva de los establecimientos de producción avícola afectados. Así se podrá contemplar si las exenciones son totales o parciales.

Según publicó Minuto Neuquén, el ministerio de Producción y Agroindustria, a pedido de Carreras, solicitará la homologación y asistencia económica a los organismos nacionales para la ejecución de acciones y obras tendientes a paliar los efectos del fenómeno. También se trabajará para otorgar financiamiento o refinanciar deudas existentes de aquellos establecimientos avícolas afectados, aplicando condiciones financieras diferenciales tendientes a reactivar su capacidad productiva.